Estos son los orígenes (poco conocidos) de cuatro arepas colombianas
- Arepas de chócolo
- 9 ago 2019
- 3 Min. de lectura
Actualizado: 18 sept 2019

Colombianos y venezolanos vivimos en un eterno dilema: ¿fue acá o allá que se inventó la arepa? Lo único que tenemos claro, de momento, es que este delicioso alimento fue idea de nuestros antepasados. Es una invención tan exitosa que en 2015 movió 1.150 millones de dólares y solo en enero de 2016 se consumieron 111 millones de arepas en Colombia, según datos de la agencia Raddar publicados en el portal Verne.
Es un alimento tan escencial que siete de cada diez colombianos desayunamos arepa cada día. Por eso les presentamos algunos tipos de arepa que se pueden encontrar en las distintas regiones del país.
LA AREPA DE CHOCLO
MANDA EN EL VALLE

Aunque suene un poco extraño, las mejores arepas de choclo de Rozo, en el Valle del Cauca, las hace una paisa. Se trata de Denis García y sus preparaciones son tan buenas que fue invitada a participar en el libro ‘Cocinando con María’, que conmemoró los 180 años del natalicio de Jorge Isaacs. García cuenta que su secreto está en que, junto con su esposo Luis Ernesto, cultivan el choclo amarillo con el que hacen las populares arepas.
Esta rica combinación de arepa dulce con cuajada entró a la gastronomía del Valle del Cauca por el norte, con la llegada de los colonizadores paisas, y se mezcló con la miel de los cañaduzales.
Denis se encuentra cerca del parque principal de Rozo y gracias a su ingenio ya no solo cocina las de choclo tradicionales, sino también la arepa de choclo con todo, que lleva pollo, carne desmechada, chicharrón crocante y queso doble crema; y la nueva ‘arepa desayunadera’, más delgada y apta para acompañar un buen café bien colombiano.
AREPA DULCE DE ANÍS,
DELICIA CON SABOR CARIBE
Cuando se habla de arepas en el Caribe, la de huevo con diferentes mezclas es la más recordada. Sin embargo, la creatividad culinaria de los costeños nos ha dado una larga lista de recetas, como la arepa dulce de anís, tal vez una de las más desconocidas a nivel nacional, pero que en Bolívar, Sucre y Atlántico es de las preferidas.
Para Alex Quessep, chef sucreño, “este tipo de arepas son mestizas porque, si bien son vistas como parte de la tradición culinaria afro, al irse definiendo con mezclas, como en este caso, del anís y el azúcar, se convierten en mestizas”.
La preparación es muy sencilla: se necesita masa de maíz blanco, se adiciona azúcar, semillas de anís y una porción muy pequeña de queso costeño. Se mezclan bien todos los ingredientes, se arman las arepas dulces de anís, que tienen la particularidad de llevar un pequeño huevo para evitar que la masa se sople y se rompa la arepa mientras se frita.

AREPAS CLEMENTINAS
Y DEL 44 EN RIOBLANCO, TOLIMA
Al sur del departamento del Tolima, en la ecoregión del macizo colombiano, sigue siendo típico todo tipo de cocidos de maíz o plátano que, envueltos en hojas de bijao (cachaco, banano o plátano), se cargaban a lomo de mula en largos viajes por la cordillera y en general eran consumidos por los pobladores rurales en gran parte del país. De allí sobreviven estas variedades de arepas que han permanecido en las tradiciones gastronómicas de algunas familias del municipio de Rioblanco.
Las arepas clementinas, a base de plátano, así como las arepas del 44, a base de maíz pelado, reúnen las características de la cultura y cocina campesina. Las primeras están hechas de plátano verde machacado, maní molido, sal, grasa y carne de marrano previamente adobado y asado, que luego de revolverse con el plátano y el maní, se frita en aceite, formando las masitas redondas que las caracterizan.
Las segundas, las del 44, deben su nombre a la época gaitanista. Tienen un proceso más largo y hoy en día es menor su popularidad, pues la preparación dura, al menos, cinco días: tres remojando el maíz con lejía, luego se lava, quitando el afrecho y se deja dos días más. Se pasa por el molino y se revuelve con la grasa de cerdo, queso y sal. Finalmente se amasan en forma de bollo y se cocinan al calor de la leña o el fogón.

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